domingo, 21 de marzo de 2010

* Dibujos, algunos de ellos...









Lapiz sobre Papel.

* Te Regalo Mis Silencios

Te regalo mis silencios
cada gota que he guardado,
en el pozo de mi alma
silencios amontonados.

Te regalo mil segundos de sonrisas
cuidadosamente embaladas,
entre líneas de verso y brisa
para que vuelen aladas.

Te regalo el espacio de mis manos,
la mirada perdida de mis ojos,
la caricia de mis besos guardados
mi amor de años archivado.

Te regalo la distancia
para que la eches a un lado,
Te regalo del tiempo su esencia
para que lo dejes olvidado.

Te regalo mis letras,
mi presencia y mi ausencia,
mis idas y mis vueltas,
y mis caricias inquietas.

te regalo lo que no se,
eso que solo tú ves,
cada noche en nuestro encuentro.
…mi ser.

viernes, 19 de marzo de 2010

* Hoy no quiero hacer poesia. (en proceso)

Hoy no quiero hacer poesía, ni verso, ni prosa.
No más palabras de amor que endulzan la mente.
Basta de líneas adornadas con sentimientos rosa;
hoy le cantare a lo feo, y que me perdone la gente.

Que se enteren de una vez, los poetas notan,
también lo negro, lo oscuro, lo triste de la vida.
Muertos de última página que nunca se agotan,
en la cama de papel del indigente de la esquina.

No! Definitivamente, hoy no quiero hacer poesía,
¿Que poesía voy a hacer si voy en-latada viajando
por esta puta ciudad de mal aliento y grosería,
Rodeada de soledades apretadas y sudando?

De un lado tengo macho genital empaquetado
que se acomoda con discreción en mi hombro,
del otro, sudoroso, emo adolecente disfrazado.
Sin más quedo, mirar al frente y respirar hondo.

Mi espalda se humedece, el calor trastorna.
Se baja el adolescente y me corro mi derecha,
dos gotas mas de aire busco al fin en la ventana.
Soleado, caliente y seco el aire… Voy desecha!

En infructuoso intento de huir de mi entorno,
me absorbe el ejercicio de mirar por la ventana.
Buscando refrescar mi alma, acaso encuentro,
mas tristeza y soledad en esta insípida mañana.

La niña vendiendo flores a transeúntes sin amores,
el malabarista adicto con su circo en el semáforo,
la mujer sola y sus tres niños paridos con dolores,
el hombre del cigarro, la mentira y los piropos.

Perro muerto en intento de cruzar lo intransitable,
olores que transmutan en humos, perfumes y alientos.
Tiendas y vitrinas, de modas repetidas e incomprables,
cloaca que corre por debajo del tarantín de alimentos.

A mi lado se siento una anciana, de años amontonados,
las líneas del tiempo surcaban implacables toda su piel,
lacerando cada centímetro de su cuerpo desgastado,
mapa de historias vividas, llenas de vacios y ayer.

Mire fijamente, su rostro de mujer manuscrito de añadas.
Sonrisa de paz, de horizonte, sueño azul y muerte lejana.
Hoy quiero hacer poesía, hacer verso y hacer prosa!
Exclamó, como presintiendo el sentir de mi alma solitaria.

Señaló, La promesa en la mirada de la niña que vende la flor,
la dignidad de la madre que brega el sustento de sus hijos.
La entrega del obrero porque en su casa lo espera su amor,
el joven de la enérgica protesta, la paciencia de los viejos.

Todo encierra el secreto del amor, aunque no sea color rosa.
Solo el poeta con su corazón valiente y puro alcanza a ver,
lo hermoso de lo feo, lo dulce de lo amargo, el dolor del placer
y todo convertirlo sin trabajo en poesía, en verso y en prosa!

La anciana me entregó el libro que en sus manos traía,
se bajo en la siguiente parada con su sonrisa de paz.
Conmovida vi la contratapa del libro mientras partía.
Era esa anciana la autora… Ana Rosetti, nadie más!

Hoy quiero hacer poesía, hacer verso, hacer prosa!
Quiero llenar de sueños azules y corales la mente.
Aunque la noche este triste y se marchite la rosa,
yo le cantare al amor y que me dispense la gente!

domingo, 14 de marzo de 2010

* Se Me Hace Facil

Se me hace fácil desnudarme ante de ti,
si hace rato que mi alma esta desnuda.
La ropa se convierte en límite del pensamiento
y decide no intervenir,
en la conversación que mis pechos quieren tener
con tus ojos de mirada fresca.

Tan acalorados están en medio del silencio,
que risueños los pezones te saludan.
Acarícialos con el agua clara de los charcos
que en tus ojos,
acumuló el rocío cuando dormías.

Refréscalos, mientras con el pincel de mis dedos
trazo un camino de almíbar frio sobre tu cuerpo.
Para seguirlo después,tibiamente con mi lengua
hasta el árbol donde guardas
el arsenal de tus sentidos.

Tibia boca, come el dulce almíbar;
astuta, sedienta y vigorosa.
Anhelando el sabor inquietante de tu orgasmo
en el fondo de la garganta.


Sangre caliente, latido incesante,
gemido que se escapa
o que atrapa un beso,
y los dedos de los pies se entumecen.

Se evapora la explosión que empañó las ventanas
y mojó las sábanas.
Y en un abrazo, exhausto,
duermes recostado sobre mi vientre.

sábado, 13 de marzo de 2010

* Sueños de Luna Llena

Lapiz sobre papel.
A veces la luna hipnotiza y danza en mis pupilas, a veces la luna esta llena.

* Otoño de Amor

I
Tus manos que antes jugaban ágiles como las liebres,
lozanas como una hoja en retoño,
Hoy tiemblan cual diminuto polluelo en el frío de la noche.
Marchitas y frágiles como las hojas de otoño,
hoy en tu otoño...

Pero, ¡que cálidas son, que suave acaricias aun!

Tu cuerpo que ayer se extendió sin pudor
sobre la hierba fresca,
a merced del sol y de mis caricias.
El tierno ropaje de tu piel, suave y perfumado
como una fruta recién cortada.
(desafiabas el tiempo y el espacio)

Tu cuerpo que era infinito,
hoy yace seco y quebradizo dentro de tu vestido,
como si el sol se hubiese airado en contra de tu lozanía
Y descargado todo su ardor contra tu piel.
Hoy caen de ti hojas marchitas de otoño...
Hoy en tu otoño...

Pero, ¡qué suave es tu cuerpo, que rico huele aun!

Tu mente veloz y brillante,
llena de detalles y luz,
de ideas claras y transparentes,
llena de sueños azules sin ocaso.

Tú mi lucida y clara cascada de manantial,
mi manantial de montaña
que me dejaste beber de ti, hasta saciarme
y quedar renovado y lleno de ti.
Hoy parece que, a través de ti han corrido
mil hojas e historias.

Ya tu cauce no es claro ni fresco,
ya tu agua no es de beber,
Hay muchas hojas secas en el fondo que formó el otoño.
Hoy en tu otoño...

Pero, que grata es a mi paladar tu agua,
¡Cómo me gusta aún renovarme en ti!
Ah! Mi eterna compañera,
mi antigua jovencita de verano,
hoy en tu otoño te miro y recuerdo tus mieles,

Te miro y pienso:
Aunque por fuera te ves otoñal dentro de ti brilla la primavera,
aunque tu cuerpo se vea marchito
Para mí sigue siendo como la piel de un durazno recién cortado,
rica y hermosa para mí.

Te miro y digo,
¡No has cambiado en realidad!
Aunque ya tu mente no desborda de ideas azules de mar,
eres tan clara como el alba,
y amo la manera en que recuerdas
y revives para mí
todos y cada uno de nuestros momentos de ayer,
Nuestras historias y aventuras.

Te miro,
y me miro en el espejo,
pues tu edad y madurez sólo se compara con la mía,
y yo ya no tengo el empuje de caballos briosos de ayer
y aún así tu me amas,

Hemos cambiado, lo sé,
Pero lo hemos hecho juntos y eso es lo que lo hace hermoso.

III
Ven,
Échate en la hierba conmigo de nuevo,
siente el sol y la brisa,
ríete fresca y hermosa,
juega con tu pelo de niebla, de día nublado,
camina y canta nuestras historias.

Sigamos contando y viviendo nuestro amor de siempre,
pues nada ha cambiado entre tú y yo,
sólo ha pasado el tiempo,
(sobre nosotros, no entre nosotros)
Y el tiempo te hace más bella, más mía.
Y el tiempo me hace más pleno, más tuyo.

El tiempo nos hace más uno.

¿para qué necesitamos
nuestros cuerpos de ayer?
si tenemos
Nuestras almas de siempre

* Con la Punta de mis Dedos

Las yemas de mis dedos la conocen bien.
Cada esquina, cada curva suntuosa,
cada pliegue discreto.
Ese pequeño escondrijo de piel y nervios,
simple semillita de naranja o aceituna,
que estremece y paraliza todo mi cuerpo.

Con ojos cerrados trazo
mi intrincada geografía;
Los bosques fértiles, las altas colinas,
lomas suntuosas y llanuras calurosas.
Con el mapa grabado en la punta de mis dedos
Disfruto de un paseo solitario y silencioso
hasta el clímax personal y relajado.

Hoy, agitados pensamientos han desviado el mapa.
Tu imagen tapiza mis retinas
y tu voz penetra en mis oídos.
Solo falta el aroma y el calor de tu piel,
para materializarte en mi cama.
Como si mi mente pudiera transportar
cada molécula tuya a través del viento,
y reconstruirte bajo mis sabanas.

Teniéndote aquí por un artificio de mi imaginación,
las manos no obedecen mis instintos
Sino tus antojos, deseos,
y los disfrutes que mi piel conoce.

Entonces tu boca me recorre sedienta de sudor,
tu piel se licua en mi piel
se cuela por mis poros.
Nuestras células se abrazan,
Y diez exploradores escalan las montañas de mis senos
se adentran en el desierto sin GPS
y se extravían en la selva bajo el vientre,
en la cueva donde nace el rio caudaloso
que inunda el mar.

Mi mano se convierte en la tuya,
mis dedos en tu pene y la sabana en tu piel.
El ritmo se acelera si imagino tu lengua
revoloteando entre mis piernas abiertas
sobre tus hombros, desnuda, temblorosa.

Dedo humedecido, ritmo palpitante,
deseo de incontrolable de ti…
tu ausencia y tu presencia
se amalgaman en una olla de presión
y explotan por la válvula del clítoris
estremeciendo mi cuerpo
sudado sobre la cama.

Como ráfaga de fuego se escapa el orgasmo,
recién hervido y cristalino.
Y es arrastrado por el viento cómplice
prófugo de mi cuerpo rendido
para hospedarse con los demás
en tus labios de beso constante.

* Pasa de Largo

Transito la misma calle de aceras quebradas por raíces viejas,
hacia la misma plaza de sucios bancos y arboles secos.
La tarde calurosa me arrastra como hoja seca,
Hasta la sombra escasa de la acacia grande.

Hoy me siento a la sombra en soledad,
La prefiero a tus versos baratos de cabaret.
A tu siempre igual Balada de conquista,
A Tus palabras huecas que enfrían mi café.

La tarde se hace noche Borrando las sombras,
La plaza adquiere un matiz de cementerio.
Lúgubres espectros trazan las ramas,
mas yo prefiero, este banco solitario.

Sabor amargo y vano de placer de un día,
eso me dejas cada vez que te conozco.
Sabor rancio de beso repetido y sonrisa vacía .
Ya no quiero conocerte más, donjuan de oficio.

No me enamores más, no me seduzcas,
no me cuentes cuentos de hadas ni doncellas.
Cada día como presa tu me buscas,
cada noche me regalas la misma estrella.

Comienza a brillar la luna llena,
cansada de ser usada en cacerías féroces.
Viejo Anzuelo para pescar Sirenas,
cansada de poemas y Licántropos rapaces.

Déjame sola en esta noche nuevamente,
ya tu milenario engaño no me atrae.
Cada vez que Hablas y engalanas dócilmente,
tu vieja máscara de fiel amante cae.

Otro rostro, mismos versos , mismo olor,
un viejo deseo a consumarse otra vez.
Deshojar sin piedad a Otra flor;
sin entrega, sin amor, sin calidez.

No repitas que me quieres o me sueñas,
Con las mismas palabras que ayer usaste ,
en oídos de margaritas y rosas ingenuas.
En todas las bocas que cada día besaste.

Yo no pienso engrosar la colección de fotos,
Cual cabezas que adornan tu Choza de caníbal.
Multirostros de mujer y corazones rotos,
Yo no quiero ser tu careta de carnaval.

Pasa de largo Tenorio Trasnochado,
Sigue Tu Camino, finge que no me ves.
Si no me vas a Amar A pecho desangrado,
entonces, tampoco me desees.